El marketing de contenidos es una de las estrategias más valiosas para las empresas B2B y B2C. En concreto el último informe de Content Marketing Institute ‘13ª edición anual de Marketing de contenidos B2B’ señala que:
- El 67% de los profesionales B2B afirma que el marketing de contenidos les genera demanda o clientes potenciales
- El 72% afirma que el marketing de contenidos les ayuda a educar a su audiencia
- Y el 63% afirma que les ayuda a fidelizar a los clientes existentes
Teniendo en cuenta estos datos uno de los retos que suelen encontrarse especialmente las empresas B2B es la adaptación del contenido técnico para sus audiencias. A continuación, te explicamos qué es la redacción de contenido técnico y cuáles son las claves para adaptarlo correctamente.
¿En qué consiste la redacción de contenido técnico?
La redacción de contenido técnico se refiere al desarrollo de contenidos sobre sectores complejos caracterizados por el uso de tecnicismos como la ingeniería, las nuevas tecnologías, el sector financiero o el sanitario. Su objetivo es ofrecer información clara para ayudar, informar o educar a la audiencia objetivo.
La correcta redacción de este tipo de contenido permite alcanzar estos objetivos al mismo tiempo que la audiencia es capaz de comprender el mensaje que se quiere comunicar.
6 claves para adaptar el contenido técnico a diferentes audiencias
El proceso de adaptación de contenido técnico es un proceso complejo, que exige experiencia en el desarrollo de contenidos y dominio del sector.
Las bases de la generación y adaptación de contenido técnico son las mismas que las de cualquier otro contenido:
- Equipo con conocimiento profundo. Es importante que entiendan perfectamente el sector, las peculiaridades, la jerga técnica, etc. En el equipo pueden participar especialistas de diferentes áreas:
- Periodistas (redactores)
- Analistas
- Profesionales de marketing
- Diseñadores gráficos
- Profesionales del campo específico
- Personajes referentes o influencers
- Conocimiento de la audiencia a la que se dirige. Análisis de los perfiles, comportamientos, canales utilizados, acciones de la competencia, etc.
- Desarrollo de vocabulario clave del sector y de la temática a trabajar. Esto permite al equipo comprender mejor la jerga técnica y buscar fórmulas para adaptarlo y explicarlo mediante comparativas, infografías, y otros formatos.
Recomendaciones específicas para adaptar el contenido técnico:
- Enfocarse en el tema
Para conseguir que el objetivo y la temática expuesta quede clara es importante que el contenido sea específico y no incorpore temas muy diversos en una misma pieza.
Incorporar mucha información puede distraer a la audiencia, confundirla o simplemente propiciar la pérdida de interés.
Para evitar esta situación se puede crear un esquema inicial que sirva de guía en el desarrollo y muestre de forma clara los elementos esenciales a incluir.
- Estructuración del texto
Para que la lectura y compresión de los contenidos técnicos sea más sencilla es fundamental tener una composición coherente y estructurada. Para guiar al lector se recomienda utilizar:
- Titulares y subtitulares
Para separar y definir secciones cuando los contenidos son más extensos. Por ejemplo, en manuales de usuarios, artículos, guías o estudios.
En el título indicar de forma clara qué se encontrará en el contenido, por ejemplo los contenidos “Cómo instalar…”
- Lenguaje sencillo
Uso de frases cortas y directas, evitando siempre que sea posible la voz pasiva.
- Listados
Los lectores agradecen el formato de listas porque les muestra en un solo vistazo un conjunto de información que puede utilizarse para consejos o para explicar procesos como “12 consejos para…, 5 errores que no debes…”
- Negritas
Señalar palabras clave o frases para llamar la atención facilitará la lectura y comprensión del contenido.
- Citas
Las menciones de expertos o personal del equipo permiten a la marca conectar a través de estas personas o mostrar la perspectiva de un experto en el campo.
- Incluir CTAs
Si quieres que la audiencia actúe díselo. Incluye CTAs que indiquen cuáles son las acciones que tienen que realizar a continuación. Por ejemplo, inscribirse en un formulario o descargar más información.
- Datos actuales
Si existe una noticia o estudio reciente vinculado a la temática a tratar se puede utilizar para introducir el tema, aportar actualidad y contexto al mismo tiempo que se ofrece información valiosa.
- Formatos educativos “paso a paso”
La audiencia quiere aprender sobre la temática por ello los contenidos que explican cómo hacer algo tienen una gran acogida (How-to).
- Incorporación de ejemplos y analogías
Para que el público objetivo pueda entender claramente el contenido técnico se recomienda el uso de ejemplos y analogías que expliquen de forma más detallada conceptos más complejos.
Estos ejemplos pueden ser específicos de la temática o pueden ser simplemente una metáfora que sirva para explicar un concepto técnico para que lo entienda un público más general.
Otra técnica que puede utilizarse es tratar problemas comunes con los que la audiencia se sentirá identificada o hablar de la propia experiencia explicando un suceso real para conectar con ellos.
- Análisis de productos/servicios (product reviews)
Una buena forma de explicar y adaptar el lenguaje a cada audiencia es contar con la ayuda de influencers, periodistas, bloggers que puedan probar y contar su experiencia concreta basada en el uso.
- Uso de contenido visual y explicativo
El uso de recursos visuales son clave en los contenidos técnicos, ya que apoyan la compresión y amplían la información convirtiéndose en un elemento necesario.
Estos pueden ser por ejemplo flujos de procesos, imágenes, infografías, demos, etc.
- Uso de enlaces o recursos complementarios
Para apoyar las referencias, ampliar información o complementar el contenido del que se habla se pueden incluir enlaces a:
- Organizaciones referentes
- Revistas sectoriales con noticias y artículos de interés
- Webs y blogs propios o relacionados