Desde hace algunos meses las nuevas aplicaciones de inteligencia artificial (IA) están dando mucho que hablar, desde DALL-E 2, que puede crear imágenes realistas a partir de una breve descripción, hasta Bing de Microsoft que genera respuestas inmediatas basadas en ChatGPT.
Es probable que ChatGPT sea la aplicación de la que más hayas escuchado hablar. Incluso puede que ya la hayas utilizado. Interactuar con ChatGPT es sorprendente y puedes invertir horas probándola, pero además de proporcionar entretenimiento, ¿cuáles son las implicaciones de ChatGPT en el mundo real? ¿Debería considerarse una amenaza o un aliado en nuestro sector?
Generación de contenidos: repercusión del uso de ChatGPT
Desde el lanzamiento de ChatGPT a finales del año pasado se han publicado numerosos artículos de opinión, informes y han surgido polémicas entorno a este tema. Twitter ha recogido hilos de conversaciones donde los redactores han compartido sus opiniones y preocupaciones al respecto volviéndose virales.
Es posible que la IA pueda utilizarse para generar contenidos, pero es poco probable que sustituya por completo a los redactores, al menos a corto plazo. Aunque se puede entrenar a la IA para generar textos basados en patrones y estructuras, actualmente carecen de la creatividad y los matices que aportan los redactores a sus trabajos.
Además, algunos estilos de redacción, como la creativa y el periodismo, requieren un toque humano para ser eficaces.
Aunque es improbable que la IA sustituya por completo a los redactores humanos, no se puede negar que existen ciertos casos de uso.
Ejemplos del uso de ChatGPT para generar contenidos
Es posible que esta tecnología se utilice para ayudar en:
- Planificación y sugerencia de contenidos
- Detección de errores ortográficos o tipográficos
- Edición de contenidos basados en aspectos SEO
- Ayuda en copies para anuncios
Esto sugiere que ChatGPT podría ayudar a los redactores. Sin embargo, la participación de una persona cualificada será esencial para garantizar que el contenido tenga sentido, sea veraz, aporte valor y no sea genérico.
ChatGPT vs. Algoritmo de Google: implicaciones SEO
Google sigue desarrollando potentes algoritmos para detectar contenidos generados por sistemas de IA. Estos algoritmos buscan patrones, incoherencias, uso excesivo de palabras clave y legibilidad general. También identifican los contenidos que se han elaborado a partir de múltiples fuentes. Jon Gillam, experto en plagio por IA, explica en un artículo para Business Age que «si [el contenido] entra dentro de una estructura identificable por el algoritmo, Google lo marca».
A pesar de ello, Jon explica que «GPT-3» es más difícil de detectar que los modelos anteriores de procesamiento del lenguaje natural (PLN). Mientras Google refuerza sus algoritmos, la tecnología se vuelve cada vez más sofisticada a la hora de evadir la detección. El Defensor de las Búsquedas de Google, John Mueller, describe esto como «el juego del gato y el ratón».
Además de la identificación, también hay que enfrentarse al problema de los contenidos falsos. Existen varios ejemplos en los que ChatGPT produce información ficticia, incluyendo la invención de resúmenes académicos, que convencieron incluso a científicos. También hay referencias de una afección psicológica totalmente inventada, como se relata en un artículo titulado «ChatGPT Is Dumber Than You Think» (ChatGPT es más tonto de lo que crees) para The Atlantic o respuestas del nuevo Bing de Microsoft, basado en ChatGPT, que afirmó ante una consulta que el año actual era el 2022.
My new favorite thing – Bing's new ChatGPT bot argues with a user, gaslights them about the current year being 2022, says their phone might have a virus, and says "You have not been a good user"
Why? Because the person asked where Avatar 2 is showing nearby pic.twitter.com/X32vopXxQG
— Jon Uleis (@MovingToTheSun) February 13, 2023
Sin embargo quizás el error de IA más costoso hasta la fecha lo cometió el bot de Google Bard. El robot dio varias respuestas falsas a una consulta sobre el telescopio espacial James Webb. Afirmaba que había tomado las primeras imágenes de un planeta fuera del sistema solar terrestre. En realidad esta hazaña la consiguió el Very Large Telescope del Observatorio Europeo Austral. Este error acabó costándole al gigante tecnológico más de 100.000 millones de dólares.
No cabe duda de que es increíble ver lo que esta tecnología extrae de su inmensa biblioteca, pero en los casos en que el contenido debe ser totalmente fiable, las respuestas deben ser rigurosamente interrogadas. Y ahí es donde entran en juego las personas.
ChatGPT: Contenidos genéricos y sin creatividad
Sin redactores y editores que comprueben, revisen, contextualicen, verifiquen los hechos y transformen sus resultados en contenidos que aporten significado y valor, ChatGPT no es más que un nuevo juguete.
Además de contener imprecisiones, los contenidos generados por IA pueden ser muy genéricos. Por ejemplo, si le das a ChatGPT un texto escrito, el resultado sólo será tan bueno como el texto escrito. Pero si le das a un creativo un briefing su cerebro se pondrá en marcha y empezará a profundizar en el desafío.
La solución que puede aportar un creativo es completamente diferente. Se basará en la estrategia y la comprensión de sus matices, su humor, su emoción y su capacidad para desafiar al sentido común sobre un tema son los elementos diferenciadores que les permiten ofrecer un trabajo diferencial.
Las ideas empiezan como una semilla y, con iteraciones, pueden florecer hasta convertirse en resultados impactantes. A medida que avanzamos, el sector no debería ver ChatGPT como el sustituto de un redactor. Al contrario, debería verse como una herramienta que puede utilizarse para ayudar al redactor en estas iteraciones. Ya sea optimizando el SEO, corrigiendo la ortografía o liberando tiempo para otras tareas más importantes o interesantes.
En última instancia, debemos aprovechar lo que la IA puede hacer, reconociendo al mismo tiempo lo que no puede. No puede hacer el trabajo de un redactor al mismo nivel, pero quizás pueda ayudar en áreas en las que se carece de habilidades, tiempo o interés. Y todo lo que pueda hacernos la vida un poco más fácil me parece más un amigo que una amenaza.