Ahora que el Real Madrid parece que ha entrado en la historia del fútbol ganando su décimo tercera Champions y haciendo mayor la leyenda blanca es buen momento para analizar los egos que existen en el equipo.
Tras el pitido final del árbitro y las polémicas declaraciones de Cristiano Ronaldo que dejaron entrever su personalidad, me puse a pensar en las grandes diferencias que existen entre los jugadores del Real Madrid y en lo necesarias que son cada una de ellas.
Fuente: El Salvador Times
Al pensarlo, lo extrapolé a las agencias de comunicación, que parece ser lo mío (o al menos, más que el fútbol) y me di cuenta de que en toda agencia, ya sea de comunicación, marketing, eventos o servicios plenos, hay o debería haber distintas personalidades que se complementen entre sí. Podríamos hablar incluso de que una misma persona puede ser Cristiano Ronaldo o Nacho Fernández según el momento o la campaña que esté llevando a cabo. Pero ¿cuántas personalidades hay y cómo se dividen?
- El educado y siempre correcto. Es cumplidor con su trabajo y no le gusta destacar por encima de los demás, aunque siempre se preocupa porque su trabajo esté bien hecho, como Nacho Fernández. En ocasiones puede resultar diplomático en exceso y se espera que se “moje” más, sobre todo, cuando debe reclamar a un periodista una información publicada erróneamente.
- El líder indiscutible. Inspira a su equipo y sabe como motivarlo. Suele triunfar si ha sido uno de ellos y por sus méritos ha conseguido el puesto que ostenta, como Zidane. Entre sus difíciles tareas está la de hacer equipo y conseguir una perfecta comunión entre todos y defender a sus ejecutivos de cuentas ante el cliente, como Zizou lo hace en rueda de prensa.
- El pasional. Pone toda la carne en el asador, tanto para lo bueno como para lo malo. A veces peca de ser demasiado impulsivo y debe morderse la lengua ante el cliente, como Sergio Ramos lo hace si el árbitro está cerca. Sin embargo, siempre aceptará cualquier reto, aunque sea una acción que requiera convocar a todos los periodistas del panorama nacional o conseguir que la influencer con más seguidores de Instagram mencione a tu cliente en uno de sus stories.
- El ambicioso. Se parece a Cristiano Ronaldo en la exigencia que tiene consigo mismo y con su equipo y no se asusta ante los retos pero también peca de tener un ego superlativo y le encanta ser el centro de atención, algo muy negativo en una agencia de comunicación. En cualquier evento, entrevista con periodistas o grabación para medios, los trabajadores de la agencia son los que están detrás de todo y deben pasar desapercibidos.
- El proactivo. Desde que llegué a LEWIS siempre he escuchado que ser proactivo es la mejor de las virtudes de un ejecutivo. Tener iniciativa, ser imaginativo y proponer acciones de PR es lo que siempre agradecerá cualquier manager. Marco Asensio es ese jugador que no pregunta si puede tirar a puerta, si no que tira y, además, mete un golazo por toda la escuadra.
¿Has conseguido saber cuál eres? ¿A cuál de ellos te gustaría tener en tu equipo?