Cervezas La Virgen tiene mucha historia detrás de sus productos y curiosamente el concepto de esta cerveza madrileña surgió en San Francisco, donde el craft beer inspiró a sus fundadores para volver a España e iniciar esta aventura.
La diferenciación de esta compañía frente a la competencia se centra en el control y gestión de todo el proceso, desde la producción hasta la distribución del producto, nos explica César Pascual Head of Marketing de Cervezas La Virgen.
Iniciaron su producción ofreciendo una variedad de cerveza que les permitiera conectar con los clientes de los bares, donde realmente se disfruta de grandes momentos y donde se hace marca, y no quisieron apostar por una distribución a grandes superficies. Bajo esta idea han ido creciendo y abriendo incluso locales propios en el centro y alrededores de Madrid. Estas bases y su trabajo han originado el lanzamiento de nuevas variedades y les ha permitido con los años formar parte de la multinacional AB InBev.
“La distribución, dentro de los posible, es importante que se realice por parte del propio elaborador. Que sea él quien se acerque a vender y esté formado para explicar el producto; esta siempre fue una de las claves de La Virgen.”
César Pascual, Head of Marketing de Cervezas La Virgen
Uno de sus objetivos principales se mantiene en el tiempo: generar cultura cervecera y buscar más oportunidades para que la gente pueda seguir probando su cerveza.
El diseño es un punto importante para una cerveza porque que se da por hecho que el producto es bueno, pero hay que conseguir una buena imagen en el mercado y llamar la atención. Para ello la compañía siempre ha trabajado una imagen de marca atemporal y su diseño se ha mantenido casi intacto a lo largo de sus más de 11 años.
Desde un primer momento tenían claro que querían que la imagen fuera una mujer, que transmitiera la tradición española de los santos y vírgenes, sin incluir una connotación religiosa. Por ello eligieron una representación que evocase a una mujer andaluza y representará la autenticidad de esta cerveza artesanal.
Su estrategia de marketing a nivel digital cuenta con un presupuesto reducido, pero aún así el proceso de digitalización se llevó a cabo antes de la pandemia y se impulsó como consecuencia del cierre de los bares. De la época del confinamiento, César nos recuerda lo bien que funcionó la suscripción al “El Birrero”, su programa de fidelización con la que todos los meses envían diferentes packs de cerveza a casa de los suscritos.
En cuanto a sus canales de redes sociales, creen en la importancia de conectar con los usuarios, pero siempre a través de un contenido interesante y vinculado con la compañía, sin forzar a estar presente en nuevas plataformas como TikTok si no tienen el contenido adecuado.
En lo que respecta a campañas, Cervezas La Virgen siempre ha apostado por campañas diferenciales, como la campaña del “crowdfunding para rodar el mejor anuncio de cerveza”. Con esta acción la compañía abanderó el mensaje de que su inversión es para producir más y mejor cerveza y no tanto para el marketing. Otra de las campañas relevantes fue “Amor de Bar” que al igual que otras cerveceras quisieron apoyar y homenajear a los hosteleros ante una situación complicada. Y no podemos dejar de comentar la campaña para el día del orgullo gay, “Ama sin Etiquetas”.
Hemos desnudado nuestras botellas para reivindicar con orgullo, con libertad y sin tabúes un amor ❤️ sin etiquetas. ¡Feliz #Orgullo2019! #AmaSinEtiquetas#Pride2019#loveislove #OrgulloLGTBI pic.twitter.com/RqhHu8R8y7
— Cervezas La Virgen (@CervezaLaVirgen) June 28, 2019
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