En la actualidad, el marketing digital tiene en la viralización su principal baza. En 2016, los social media tratarán de aprovechar las virtudes que las redes sociales y la viralización de contenidos implican, para generar una serie de estrategias publicitarias mucho más efectivas. Se pensaba que el panorama estaría próximo a una crisis, debido a la dificultad para provocar impacto y emociones en el espectador. Sin embargo, se ha demostrado que aún existen modos de tocar el corazón de la audiencia. Conseguirlo depende de varios factores. Entre ellos, la capacidad de empatizar con el usuario, la cercanía y la personalización de los mensajes. El snackable content se perfila como la herramienta perfecta, según las tendencias 2016.
El snackable content
La sociedad presente es fugaz y exige inmediatez. Es necesario comunicar con eficacia y, sobre todo, comunicar deprisa. Cada segundo es oro, así que los esfuerzos deben centrarse en contar lo máximo en el mínimo tiempo. Se trata de elaborar mensajes para un usuario multitarea, que está en varios frentes a la vez y demanda brevedad. Mediante el snackable content se preparan historias cortas, nunca de más de 500-800 palabras o 1-2 minutos de duración.
Debe tratarse de una información de calidad y bien presentada. ¿Cómo hacerlo? Lo común es ofrecer publicaciones breves y periódicas, que nos van contando una historia que nos interesa y nos conmociona. Un buen punto de partida es una historia larga que iremos dividiendo en capítulos.
Formas de hacer snackable
- A través de vídeos. No deben exceder de un minuto de duración.
- Crear imágenes con palabras o frases actuales.
- Actualizar los estados en las redes sociales y ofrecer los trozos de la historia con cuentagotas.
- Infografías.
- Encuestas rápidas.
- Artículos breves de 500-700 palabras.
- Audios de sesenta segundos.
En definitiva, transmitir grandes mensajes en pocas palabras es lo que persiguen las tendencias 2016 de social media.
