La vida, tal y como la conocíamos hace unos meses, ha cambiado totalmente y qué mejor época que el verano para empezar a adaptarnos a la “nueva normalidad”. También las empresas y sus estrategias de marketing tienen que renovarse ahora que los eventos presenciales se han cancelado, las estrategias de marketing de contenidos han cambiado totalmente y los presupuestos de marketing se han congelado. La pregunta es, ¿cómo podemos sacar ventaja de esto? O mejor dicho, ¿cómo podemos priorizar los esfuerzos dedicados a marketing durante una crisis como esta?
En este punto, destinar atención extra a la estrategia de SEO te ayudará a incrementar el tráfico orgánico de tu web y a tener a punto y bien posicionado tu site cuando los presupuestos de marketing se reactiven. Tanto si se trata de iniciar una estrategia de indexación, como de hacer optimizaciones sobre tus keywords, o añadir valor a páginas de tu web que se han quedado anticuadas; la optimización en los motores de búsqueda es una tarea que conseguirá marcar la diferencia en su estrategia digital.
A continuación, puedes encontrar varias tácticas SEO de alto impacto y que no te llevarán demasiado tiempo:
1.“Arregla” la indexación de tu página
Seguramente ahora te estés preguntando, “¿qué es la indexación de mi página?”. Pues bien, llegados a este punto, podemos decir que Google es como una biblioteca: cada página web es un libro y cada página se rastrea e indexa en la biblioteca o índice de Google. Nosotros, los especialistas en marketing digital, tenemos el control total sobre qué páginas queremos que Google rastree e indexe. Asegurarte de que esta estrategia de indexación está completamente “arreglada” u optimizada es una de las técnicas de SEO más fáciles de implementar.
Investiga:
Inspecciona tu sitemap y el archivo robots. El primero puedes encontrarlo añadiendo /sitemap.xml al final de tu dominio web. El segundo, añadiendo /robots.txt.
Tu sitemap es la lista de URLs que quieres que Google rastree, mientras que el archivo robots indica a Google qué URLs no quieres que rastree. Hacer que estos archivos coincidan y estén actualizados es crucial para ofrecer a Google un rastreo fácil y cómodo cuando visite tu web.
Si no has verificado la propiedad de tu web en Google Search Console (GSC), deberás hacerlo antes de poder acceder al listado de páginas indexadas.
Al iniciar sesión en tu consola de búsqueda podrás “navegar” por todo el informe.
A continuación, haz clic en el informe de página y exporta el sitemap indexado y no enviado y las páginas enviadas e indexadas. Debes buscar aquellas páginas indexadas que quieras excluir del índice de Google y asegurarte de que todas las páginas que envía el sitemap están incluidas en el mismo. También debes comprobar que Google no rastrea páginas de baja calidad o contenido duplicado, que son factores que penalizan el posicionamiento.
Cuando hayas actualizado tu sitemap, vuelve a enviarlo a Google dentro de GSC.
2. “Limpia” tu página de links rotos
Las páginas antiguas que se eliminan y no redirigen a ninguna otra página pueden provocar que los enlaces internos se rompan, provocando una mala experiencia para el usuario. Para identificar los enlaces internos rotos, puedes rastrear tu web utilizando herramientas como SEMRush, Moz o Screaming Frog. Es muy fácil optimizar tu blog o tu página de producto/servicio arreglando los enlaces internos que están rotos. Aunque quizás necesites dedicarle un tiempo, tu estrategia de enlaces internos se verá recompensada.
Exporta las páginas e inspecciónalas para asegurarte de que son URLs válidas. Prioriza las páginas de servicio/producto y los artículos más destacados del blog. Si encuentras una URL dentro de tu site que sea similar al enlace roto, redirígelo a esa URL.
*Sugerencia: es una práctica recomendada de SEO corregir dichos enlaces dentro de la página real en el anchor text. Esto puede llevar mucho tiempo, pero es muy necesario ya que reduce las cadenas de redireccionamiento 301.
Por ejemplo:
No recomendable: Enlace roto> URL de redireccionamiento > URL final
Recomendable: Enlace roto> URL final
3. Elimina las páginas de baja calidad
Como a Google no le gustan las páginas de baja calidad, no deberíamos mantenerlas en nuestra web. Como propietarios de un sitio web, tenemos control total sobre nuestro SEO on-page, por lo que debemos prestar atención a este tipo de cuestiones y seguir los factores que Google “premia” a nivel de posicionamiento a la hora de desarrollar nuestra estrategia de marketing de contenidos.
Para encontrar estas páginas de baja calidad, inicia sesión en tu cuenta de Google Analytics (GA) y exporta todas las landing pages principales. Así puedes encontrar las páginas con métricas de comportamiento deficientes, altas tasas de rebote o poco tiempo de permanencia en la web. Puedes investigar un poco más a través de la consola de búsqueda y analizar PageSpeed Insights (PSI), lo que también puede estar contribuyendo a generar páginas de baja calidad.
Debes examinar las URL para ver si hay algún contenido permanente que pueda optimizarse y mejorarse de cara al posicionamiento. Para todas las demás páginas de baja calidad que no añaden ningún valor, puedes redirigirlas a una página más relevante que incluya contenido similar. Si tienes problemas para encontrar un blog similar, redirígelo a la página general de categoría del blog, en vez de a la de inicio. En este punto, debes usar tu propio criterio pero no conviene redirigir siempre a la página de inicio de la web.
Y ahora, ¿por qué no ir un paso más allá? Es el momento de profundizar un poco más en las páginas de baja calidad para ver cómo puedes optimizar tu web, añadiendo más valor al usuario, mientras mejoras tu posicionamiento orgánico. Revisa tu estrategia de mapeo de palabras clave para ver cómo entrelazar las páginas de baja calidad en tu estrategia general de SEO. ¿Puedes hacer optimizaciones fáciles y seguir una keyword de baja relevancia? En caso afirmativo, aprovecha tu estrategia de SEO on-page. Vuelve a escribir los tags y optimiza la metadescription para incluir la palabra clave objetivo. Añade un anchor text rico en palabras clave en toda la página, siempre que tenga sentido. Una vez completado, verás cómo mejora el tráfico orgánico de estas páginas recién optimizadas.
Estas tácticas rápidas de SEO benefician el posicionamiento web en buscadores y deben ser monitorizadas de forma regular. Si no estás seguro de qué camino seguir en tu estrategia de SEO, comienza con esta “limpieza” básica para que, cuando puedas intensificar tus acciones de marketing, tu web esté puesta a punto.
Si necesitas mejorar el posicionamiento orgánico de tu web en estos tiempos de crisis, echa un vistazo a nuestros servicios de SEO.