Frente a la estrepitosa caída de ventas en los principales centros de producción, como China, consecuencia de los efectos de la pandemia, el mercado ha empezado a registrar signos de recuperación en el mes de abril según datos de Statista.
Acompañando a esta situación se plantea un factor que condiciona el rendimiento y futuro del sector, la aplicación de nuevas tecnologías en los automóviles. En base a su aplicación en la producción de nuevos vehículos se prevé que en la próxima década 1 de cada 5 ventas sea de vehículos eléctricos y que la flota mundial se incremente.
En el caso concreto de España, nuestras plantas de producción se encuentran entre las más eficientes y automatizadas de Europa, con 1.000 robots industriales por cada 10.000 empleados. En los últimos años más del 80% de los vehículos fabricados en España se han exportado a más de 100 países. Y es que el sector de la automoción en España representa el 10% del PIB y el 18% del total de las exportaciones españolas.
Nuestro equipo ha analizado las tendencias que se están produciendo en el sector como consecuencia del impacto de la tecnología.
Irrupción del vehículo compartido
La dependencia del vehículo para uso particular está disminuyendo como consecuencia de la urbanización y la fragmentación de desplazamientos con motivo del aumento de nuevas soluciones de transporte compartido y la mejora del transporte público.
Además, el crecimiento del uso de coches compartidos con compañías como car2go continúan haciendo mella en el espacio del automóvil y haciendo innecesario la propiedad de un coche.
Matthias Müller, Chief Executive de Volkswagen lo resumió perfectamente el año pasado cuando dijo que:
«En el futuro, mucha gente no tendrá coche. Pero todos ellos podrán ser clientes de Volkswagen de un modo u otro, porque ofreceremos un concepto de movilidad mucho más amplio que el actual.»
El paso del Hardware al Software
Los conductores lo quieren todo. Se espera que la creciente digitalización y los avances tecnológicos aumenten las inversiones en el sector automovilístico hasta los 82.010 millones de dólares en 2020 como consecuencia de la demanda de accesibilidad y conectividad de los conductores (por ejemplo a música, sistemas GPS y conexión con amigos) mientras conducen.
«La digitalización está transformando el sector de la automoción, del tradicional hardware de componentes a una industria centrada en el software y las soluciones informáticas, acelerada por la demanda de nuevos e innovadores servicios.”
Frost & Sullivan
Soluciones de seguridad y 5G
Pero las exigencias digitales van más allá de la conectividad, según Mckinsey, los consumidores también se centran en la seguridad activa y la facilidad de uso, por lo que las características técnicas tienen que cubrir estas necesidades. Marcas como BMW ya lo están haciendo al utilizar Realidad Aumentada (VR) para ayudar a los conductores a ver y responder mejor a las condiciones de la carretera, como el clima y el tráfico.
Los fabricantes seguirán reduciendo las distancias en materia de conectividad estableciendo relaciones con empresas que puedan elevar su experiencia digital. En el CES 2019, Audi mostró Holoride, una experiencia VR adaptativa que reacciona a los frenos y giros durante el recorrido en función de la ubicación. Esta novedad se desarrolló en colaboración con Disney, y afirma que reduce el mareo durante el trayecto, lo que podría ser clave para el entretenimiento en los vehículos sin conductor.
Por otra parte, la empresa india de transporte por carretera Ola ofrece a los pasajeros entretenimiento durante el trayecto a través de su consola HD en la cabina.
Con la llegada e implementación total del 5G, las oportunidades que presenta la conectividad hiperrápida para el sector son importantes. La conectividad sin precedentes que prometen estas redes redefinirá drásticamente las capacidades de los vehículos conectados y autónomos (CAVs). Microsoft pronostica que para el año 2025 el 100% de los vehículos nuevos estarán conectados y en el 2030 habrá un 15% de vehículos autónomos.
Una de las mayores implicaciones del 5G es su capacidad para proporcionar la conectividad de alta velocidad necesaria para impulsar los vehículos autónomos. El 5G permite que los coches se comuniquen entre sí, informando de su posición, velocidad e intención direccional. Una comunicación rápida y eficaz entre vehículos (V2V) será vital para que los vehículos autónomos o semiautónomos puedan circular por las carreteras en el futuro.
Las comunicaciones V2V también podrán utilizarse para mejorar la seguridad vial de los vehículos conducidos por personas. Los conductores podrán recibir avisos de los vehículos que se aproximan, que de otra forma podrían pasar desapercibidos. Y la conectividad podría ampliarse para incluir otros peligros de la carretera como bicicletas, patinetes e incluso peatones.
Sostenibilidad medioambiental
Junto a todas estas demandas y cambios, la contaminación sigue siendo una preocupación creciente entre los consumidores, pero esperan que los fabricantes empiecen a promover (y demostrar) la calidad del aire durante los desplazamientos. Esta es una tendencia vista ya en tiendas y hoteles, pero que se espera que integren los vehículos para conocer la calidad del aire interior y exterior. Volvo, por ejemplo, lleva varios años promocionando su monitor CleanZone en el coche.
Como parte de la demanda de sostenibilidad y de las iniciativas gubernamentales para abordar las emisiones de combustible, se espera ver un aumento de los vehículos eléctricos. Morgan Stanley predice que cuatro de cada cinco coches vendidos en el mundo serán de batería eléctrica en 2050. A medida que crezca la adopción y el uso de los vehículos eléctricos, también lo hará la infraestructura de recarga, con empresas importantes como Shell y Engie apostando con sus adquisiciones de NewMotion y EVBox, respectivamente.
¿Cómo pueden las marcas beneficiarse de estas tendencias?
Frente a estos cambios se plantean oportunidades para que la marcas interactúen con sus clientes, por ejemplo al introducir el coche en el proceso de compra utilizando la red 5G conectada al vehículo. También se podrán sugerir compras en lugares específicos, o incluso actuar como punto de venta para el consumidor en función del comportamiento o situación.
Por otro lado, tendremos la posibilidad de introducir el entretenimiento a bordo del vehículo y llevarlo al siguiente nivel. Mejorando la experiencia del usuario durante el viaje ofreciendo un entretenimiento atractivo e inversivo.
Frost & Sullivan